Decir a las personas que apreciamos y admiramos todo lo que pensamos y sentimos sobre ellos, no siempre es fácil, pero existe un tipo de personas, y me incluyo, que a pesar de expresarlas mientras compartimos un café, nos da la sensación de habernos quedado cortos, así que con su permiso voy a contarles sobre “un hombre de valor” . Creció en medio de micrófonos y visitas a estudios de grabación y estaciones de radio, su padre un locutor famoso en Santa Marta, Colombia, le arreglaba el día a cualquiera, le sacaba una sonrisa a la vida, en medio de cualquier circunstancia y sería esa la mejor herencia que él, mi amigo y colega Carlos Monnery Caiaffa heredaría de su sabio padre. encontrar esa magia que yace dentro de él le costaría unas cuantas desventuras luego de recorrer la vida de juventud y aprender de sus propias vivencias, las mismas que alimentaron su decidida convicción y dar inicio a su transformación. Como hombre de fé, Carlos Monnery se sumerge entonces en las cavernas de su propia alma y empieza un proceso doloroso, pero era necesario “desprenderse de todo lo que tenía encima”, que pesaba y estaba gastado, tal y como lo hacen las águilas, ave preferida por Carlos que le valdría de inspiración para desarrollar luego de su proceso, lo que serían sus exitosos talleres, conferencias, charlas y libros entre los que quiero resaltar su primera obra: “Un buen final, un gran comienzo”. Una vez encuentra esa vocación que lo lleva a trascender en la Comunicación Social, no se detiene en la formidable tarea de construirse a sí mismo preparándose para “ser” el Carlos Monnery que hoy conocemos; recuerdo haberlo entrevistado hace 7 años en una famosa emisora de la ciudad de Santa Marta, en el que presentaba su conferencia-taller como Coach de vida, “Águilas no cazan moscas”, fue inspirador escuchar a un ”hombre con propósitos” cuya charla entregaba las llaves para descubrir el potencial que hay en cada uno. Carlos Monnery, ha visitado muchos pueblos, municipios, grandes ciudades, ya sea a bordo de un incómodo bus, avión o chalupa, (de esas que atraviesan los caudalosos ríos de su amada Colombia) la emoción siempre es la misma, lleva en su equipaje toda la ilusión por impactar las vidas de quienes le escuchen al asistir a sus conferencias, cree ciegamente en el poder que tienen las personas en “transformar” sus circunstancias desde la Guajira hasta el sur del país, a través de la re-educación, la programación Neurolingüística, y la comunicación asertiva; y lo está logrando con sus poderosas conferencias “Creer para crear”, “El Poder de la resiliencia”, “No eres tú, es tu cerebro”, “Águilas no cazan moscas, I y II”, y un sin número de conferencias que han funcionado como herramientas a esas personas encargadas de la formación de cientos de vidas: los maestros; Carlos como Coach en Educación, se ha ganado el título de Formador de Formadores, pero hasta ahí no llegarían sus pretensiones, también lo haría, como Coach para Padres, todos sus procesos le han dado la sabiduría, heredada en parte por su padre, de construir su propia marca, con su sello, con las herramientas de vida a través del afecto, lo he escuchado decir mucha veces que sin eso no hay nada y claro como no afirmarlo cuando el mismo es el resultado de un papá al que nada le quedó grande, el afecto, el amor, la sonrisa, el carácter, son las mejores herramientas para volar sobre la tormenta como el águila. Toda esa experiencia de vida lo llevó a concluir una parte de ella en su última gran obra “Las águilas no cazan moscas”, donde recopila toda su sapiencia para enfrentar cualquier situación, transformar las circunstancias, y como él mismo lo dice en su libro “Los hombres y mujeres grandes no se detienen en pequeñas cosas”. Para Carlos Monnery los límites solo están en la mente, no cree en lo imposible pero tampoco da nada por sentado, por eso trabaja cada día desde hace más de dos décadas para lograr su propósito y no es otro distinto al de “Transformar Vidas”.

Hola! Soy Jenifer Zambrano Camaño, Psicopedagoga y Coah de vida, Mamá de una hermosa niña y Esposa de un talentoso y amoroso Ingeniero. En mi experiencia como Mamá Homeschooler y mi pasión por la Educación alternativa y divergente, diariamente acompaño a generar conciencia en las familias, madres, padres, y educadores como agentes de transformación y cambio, en dejar huellas desde el corazón a través de una crianza respetuosa, mediante el Centro de entrenamiento en línea para familias que educan en casa "Obra con Propósito". Es en este diario compartir es donde conozco a Carlos Monnery, y sentí que nuestra visión tenía el mismo propósito; fue entonces cuando decidí hacer equipo de trabajo con él. Trabajar con Carlos Monnery es, realmente gratificante, aprendo constantemente, priorizo y doy enfoque a mis objetivos... Carlos es como una linterna en un camino oscuro y empedrado, te acompaña y te hace reír, al mismo tiempo que reflexionas y avanzas sin darte cuenta. Trabajar con Carlos Monnery es, dar propósito a cada una de tus acciones con un impacto social que trasciende. Trabajar con Carlos Monnery es, tener una guía precisa, oportuna y de calidad, acorde a tus necesidades. Trabajar con Carlos Monnery es, Amor, Paciencia, Diversión, Entendimiento y Acción. Es por esto que te invito a que te des la oportunidad de que a través de Carlos Monnery definas, priorices y materialices tus objetivos. Saludo especial, Jenifer Zambrano C.

Hablar de Carlos Monnery, necesariamente evocan recuerdos del momento que nos conocimos, creo que el universo realiza trazos perfectos donde ubica los momentos, las personas en los instantes precisos, pero hoy no es el momento de expresar esa experiencia y momento de conocerlo, de lo que si deseo hablarles es de lo importante que fue, que ha sido para mi estado personal y profesional, transitaba en esa búsqueda incansable de mejorar como persona, como profesional, de encontrar más herramientas que nos permitieran apalancarnos mejor, de realizar mejor nuestro trabajo no por prepotencia sino como una necesidad intrínseca de mejorar, no somos perfectos pero si perfectibles, así lo señala Monnery, a mi juicio, desde mi óptica, es un excelente profesional, un coach de vida que nos invita y motiva a la transformación personal, al compromiso, sus enseñanzas tienen un trasfondo en el ser de las personas, estoy contento y agradecido por la oportunidad de conocerlo y absorber de el parte de sus conceptos y su sapiencia, vamos en esa búsqueda incansable de avanzar de mejorar, porque nuestro compromiso tiene que ser servir, que nuestro trabajo ayude a transformar vida, es fácil para mi hablar de Carlos Monnery, porque sus aportes me han fortalecido mucho, es un profesional que está siempre presente para darte una mirada sin mezquindad, sin esconder nada y lo hace de corazón, de Carlos Monnery podemos esperar siempre lo mejor, gracias, gracias maestro, que tu camino se expanda igual que tus enseñanzas y espero estar allí cerca para recibirlas y apropiarme de ellas, gracias. Jk